Contaminación acústica y su efecto en los océanos

La contaminación acústica y su efecto en los océanos

En los últimos meses, la mayoría de las personas que tienen acceso a las redes sociales o a los medios de comunicación son cada vez más conscientes de que estamos matando los océanos con la contaminación (plásticos, petróleo, aguas residuales), pero hay otra forma de contaminación que no aparece tan fácilmente en los titulares, y ya es hora de que empecemos a hablar más abiertamente de la contaminación acústica y su efecto en los océanos.

Bajo la superficie hay un hermoso coro, un paisaje sonoro secreto que los humanos rara vez llegan a escuchar. Todo lo crea, desde el inquietante canto de la ballena azul hasta los diminutos silbidos de otras especies menos conocidas que se alimentan en los arrecifes. Pero el ruido creado por los barcos y las construcciones submarinas está ahogando esta orquesta intemporal y causando cada vez más problemas a la vida marina. No es la primera vez que abordamos este tema, pero, a diferencia de la contaminación por plásticos, la contaminación acústica no tiene el impacto visual necesario para provocar una protesta en las redes sociales y obligar a actuar.

El mundo confía en un pequeño pero entregado grupo de biólogos marinos como el Dr. Steve Simpson, que investigan la contaminación acústica y su efecto en los océanos. El Dr. Simpson es testigo directo de cómo los peces y los mamíferos marinos se ven afectados por el ruido artificial que ahoga sus sonidos naturales bajo las olas.

Los peces dependen de su mundo acústico para escuchar y encontrar hábitats; lo necesitan para navegar, encontrar pareja y comunicarse entre ellos cuando cazan, o para evitar ser cazados.

Más recientemente, los científicos pudieron observar algunos de los arrecifes más famosos del mundo. Descubrieron que cuanto más ruidoso es un arrecife, más sano es. Una cacofonía submarina de tweets, clicks, chirridos y whoops significa que la vida acuática es abundante y la comunidad está prosperando. El silencio marino significa que el arrecife se está muriendo.

"Los peces utilizan el sonido para impresionarse unos a otros, encontrar comida o evitar a los depredadores", explica Steve. "En el océano es raro ver a más de 100 metros, pero los sonidos pueden oírse a muchos kilómetros de distancia".

Pero mientras los sonidos de la naturaleza viajan, también lo hace el ruido artificial, que puede ahogar fácilmente el paisaje sonoro natural del océano, dificultando que los peces se oigan unos a otros. Esto, a su vez, afecta a su capacidad para encontrar comida y pareja, les causa estrés y modifica su comportamiento. En las rutas marítimas más transitadas, los científicos han detectado incluso daños físicos en los mamíferos más grandes del planeta, las ballenas.

A diferencia de otras contaminaciones que entran en nuestras aguas, la contaminación acústica es la más fácil de atajar. Una vez que cesa el ruido, desaparece. No nos quedamos con detritos que siguen contaminando y matando la vida marina durante décadas, como ocurre con el plástico, el petróleo y las aguas residuales.

Afortunadamente, los científicos trabajan ahora con las navieras para diseñar motores de barco que hagan menos ruido y también se están creando los llamados "santuarios silenciosos" en zonas sensibles, por ejemplo, en torno a las rutas migratorias de las ballenas o donde a los mamíferos les gusta alimentarse y aparearse. También hay otro proyecto llamado Given Time que se dispone a ayudar a los científicos poniéndolos en contacto, junto con otros expertos, con unos 4.000 veleros que surcan actualmente las olas de todo el mundo. Los veleros generan un ruido mínimo y estas silenciosas comunidades de navegantes pueden actuar como ojos y oídos en algunos de los lugares más remotos de la Tierra.

Así pues, mientras los científicos siguen trabajando en los océanos del mundo, registrando el sonido, midiendo la temperatura del mar y cartografiando los residuos plásticos, se espera que los voluntarios de Given Time engrosen las filas de quienes desean participar y marcar la diferencia en el futuro paisaje marino y sonoro de nuestro planeta.

Puede informarse sobre la contaminación acústica y su efecto en los océanos en: http://sailinggiventime.net/ o Facebook https://www.facebook.com/svgiventime/posts

Jaymee-lee Tolliday
Jaymee-lee Tolliday
Coordinador de marketing

Jaymee-Lee es la coordinadora de marketing de Cirrus Research plc. Desde la gestión de nuestras plataformas de redes sociales en inglés y campañas de correo electrónico hasta la elaboración de contenidos atractivos, está detrás de todas las iniciativas de marketing en nuestros mercados globales.

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