Muhammad Islam, responsable de Higiene Ambiental del equipo de Molestias por ruido del Ayuntamiento de Newham, explica: «La diversidad del distrito de Newham lo convierte en un lugar vibrante y emocionante para vivir. Sin embargo, como todos los municipios, tenemos nuestros retos, como las quejas de los residentes por ruidos molestos, de las que recibimos una media de 155 semanales.
Estamos obligados a investigar las quejas por ruidos molestos; las más comunes son los ladridos continuos de perros, portazos de coches por la noche, música o televisores a todo volumen, gritos, portazos y actividades de bricolaje. Muchos problemas de ruido, sobre todo los que afectan a los vecinos, pueden resolverse de manera informal si las personas hablan entre sí para explicar el problema. Sin embargo, si este enfoque fracasa, ponemos en marcha procesos para ayudar.
Los ayuntamientos y las autoridades locales de todo el Reino Unido tienen adaptaciones y enfoques ligeramente diferentes para hacer cumplir la normativa sobre molestias por ruido. No hay ninguna directriz establecida para los residentes en materia de niveles de ruido o frecuencia de decibelios (dB) y corresponde a los consejos y municipios usar su propio juicio para abordar la legalidad de las molestias por ruido en virtud del artículo 79 de la Ley de Protección Ambiental de 1990.
En la mayoría de los casos, las autoridades locales y los ayuntamientos, como el de Newham, aconsejan que en los casos denunciados de molestias por ruido, el residente se dirija directamente al responsable, lo que en la mayoría de los casos da lugar a que ambas partes lleguen a un acuerdo amistoso. Sin embargo, este enfoque no siempre funciona y el siguiente paso sugerido es un procedimiento de mediación de terceros independiente.
Si las molestias por ruido persisten y no se consigue resolver el problema con medidas informales, es necesario presentar una denuncia formal; los residentes deben dirigirse al equipo de molestias por ruidos para que investigue directamente, lo que implica visitas periódicas de un agente de ruidos».
Se instala una grabadora de ruidos molestos si: el ruido es intermitente, no se detecta a pesar de haber visitado los agentes el lugar en varias ocasiones o no es posible detectarlo porque se produce fuera del horario del ayuntamiento, en el que servicio de respuesta a ruidos no está operativo. Esta máquina registra los niveles de ruido durante un período de 7 a 10 días y se utiliza para ayudar a decidir si constituye una molestia por ruido legal y si es necesario adoptar más medidas.
«Trojan ha ahorrado mucho tiempo y dinero al ayuntamiento y a los vecinos».
Muhammad Islam explica: «Una grabadora de ruidos molestos es un equipo muy valioso para las autoridades locales y las asociaciones de la vivienda, ya que proporciona los medios para controlar si una queja por ruido presentada por un residente local es creíble. Los resultados que obtenemos del instrumento de control del ruido nos dan una idea clara de si la denuncia por molestias por ruido es legítima y de si emitimos o no un aviso de reducción».
Para ayudar a obtener información vital y registrar datos concisos y claros en apoyo de los casos de molestias por ruido, el Ayuntamiento de Newham ha invertido recientemente en dos grabadoras de ruidos molestos Trojan de Cirrus Research. Trojan ayuda a las autoridades locales y a las asociaciones de la vivienda a proporcionar mediciones de ruido rápidas y precisas para apoyar los casos de molestias por ruido y se suministra en una discreta mochila, lo que permite al agente que lo instala marcharse con la misma mochila, para no despertar las sospechas de los vecinos.
Muhammad Islam concluye: «Las anteriores grabadoras de ruidos molestos eran muy complejas de usar, por lo que a los miembros del equipo de Molestias por ruidos les resultaba difícil configurar los instrumentos según las necesidades específicas que tuvieran. Es fundamental que un instrumento de medición del ruido sea fácil de usar y que el ruido medido sea preciso. Trojan hace precisamente eso: es fácil de usar y tiene la funcionalidad necesaria para medir con precisión las molestias por ruido. Cuando el instrumento está dentro de la pequeña caja negra, se conecta a una interfaz. Cuando está conectado, el instrumento reconoce que está enchufado y cambia al modo de ruido molesto. Esto configura el instrumento automáticamente para ofrecer las funciones y características necesarias, eliminando la necesidad de cualquier configuración.
Productos Cirrus utilizados en este estudio de caso
La grabadora de ruidos molestos Trojan2 es una solución sencilla y eficaz para medir y controlar las quejas por ruidos molestos.
NoiseAid es una aplicación web que le ofrece a usted y a sus usuarios una forma rápida y sencilla de recopilar información sobre las fuentes de ruido que les preocupan. Los usuarios pueden grabar al instante las molestias por ruido a través de cualquier teléfono inteligente, tableta, ordenador portátil o de sobremesa utilizando la sencilla interfaz, añadiendo notas cuando el ruido haya finalizado.
NoiseTools es nuestra base de datos de medición de ruido sin licencia, que se suministra de serie con nuestros sonómetros, dosímetros de ruido y kits de medición de ruido, para ayudarle a gestionar y controlar los niveles de ruido ambiental o en el lugar de trabajo.
